- GUÍA EXTERIOR. Son aquellas puertas correderas que se deslizan por una guía vista situada en la parte superior y exterior del tabique. Esta guía actúa como elemento decorativo.
- GUÍA INTERIOR. La puerta corredera se desliza a través de una guía oculta entre dos tabiques. Ésta es la solución más recurrente y utilizada en puertas, también llamadas empotradas.
- UNA SOLA PUERTA. Una hoja sencilla se desliza a través de la guía, ya sea ocultándose en un único hueco entre los dos tabiques o mostrándose a través de la guía exterior. Una sola corredera con guía exterior para la sala de juegos, una sala de audiovisuales, una de recreo o de chill out. Guía interior para la cocina, el dormitorio principal y el aseo.
- DOBLE PUERTA. Cada puerta se esconde a cada lado del hueco de paso, ocultándose entre dos tabiques cada una o sobre cada uno de ellos. Doble puerta con guía interior para separar salón de comedor y para acceder a la terraza.
- DOBLE PUERTA SUPERPUESTA. Las dos hojas de la corredera se alojan en un mismo hueco del tabique, deslizándose por una guía doble. Doble puerta superpuesta con guía interior para los pasos entre dormitorio-vestidor y cocina-office.
- GUÍA INTERIOR. La puerta corredera se desliza a través de una guía oculta entre dos tabiques. Ésta es la solución más recurrente y utilizada en puertas, también llamadas empotradas.
- UNA SOLA PUERTA. Una hoja sencilla se desliza a través de la guía, ya sea ocultándose en un único hueco entre los dos tabiques o mostrándose a través de la guía exterior. Una sola corredera con guía exterior para la sala de juegos, una sala de audiovisuales, una de recreo o de chill out. Guía interior para la cocina, el dormitorio principal y el aseo.
- DOBLE PUERTA. Cada puerta se esconde a cada lado del hueco de paso, ocultándose entre dos tabiques cada una o sobre cada uno de ellos. Doble puerta con guía interior para separar salón de comedor y para acceder a la terraza.
- DOBLE PUERTA SUPERPUESTA. Las dos hojas de la corredera se alojan en un mismo hueco del tabique, deslizándose por una guía doble. Doble puerta superpuesta con guía interior para los pasos entre dormitorio-vestidor y cocina-office.
1. Interrelaciones. Hay que tener en cuenta la relación que existe entre las salas entre las que se sitúa la puerta: de igual importancia como salón-comedor o dormitorios infantiles; o de mayor a menor importancia como dormitorio-vestidor. 2. Anchura. Si existe mucho espacio entre las dos paredes de la zona de paso como, por ejemplo, más de un metro se recomienda corredera a doble puerta. 3. Interiorismo. La juventud y la frescura de una vivienda o su sobriedad determinarán el tipo de puerta a escoger, corredera o batiente y sus características. Así como el estilo decorativo del hogar determinará el color, el material y el acabado de la puerta. 4. Detalles. Si se desea llamar la atención sobre la perfilería, los herrajes, las manillas, las hojas, el sistema de funcionamiento u otros complementos de la puerta, se debe considerar que con la corredera de guía interior quedan ocultos. 5. Precio. Éste determinará la elección de un tipo de puerta más económica u otra con un coste de instalación y mantenimiento más elevado.
Fuente : www.decopasion.com